Impactante Historia de una Joven Mula Involucrada en Narcotráfico

Febrero 21, 2017

En América Latina es muy común ver casos acerca del narcotráfico y de como varias personas son capturadas en los aeropuertos intentando transportar droga a otras partes del mundo. Hoy les contaremos la historia de una joven de 20 años que fue sentenciada a ocho (8) años de prisión.

Sandra es una joven de 20 años de edad residente en la ciudad de Bogotá – Colombia, que trabajaba como empleada del servicio en una inmobiliaria. Sandra es madre soltera y también se hace cargo de su mamá, ya que sufre de una enfermedad que le impide movilizarse.

Sandra llevaba dos años trabajando para la inmobiliaria, cuando le dieron la noticia que ya no podían seguir pagando el salario ya que le empresa estaba obtenido perdidas y tenían que reducir gastos.

Esta noticia la tomo por sorpresa ya que ella se sentía segura en su trabajo. Ella se sentía preocupada ya que tenía a cargo a su hijo de 3 años y su mamá. Sandra comenzó a pasar varias hojas de vida sin obtener resultado alguno, también habló con varios de sus amigos para ver si ellos podía ayudarla en la búsqueda de trabajo.

Toda búsqueda y apoyo de sus amigos tampoco obtuvo los resultados que ella necesitaba y esto era algo que ya se le estaba tornando en un problema, ya que debía pagar arriendo, alimentación y los medicamentos para su mamá.

En un día de desespero, Sandra salio a caminar llorando porque no encontraba solución alguna, en ese momento apareció uno de sus vecinos que le pregunto que le sucedía, Sandra le contó su historia, a lo que el hombre respondió que él podía ayudarla a conseguir trabajo y muy bien pago.

Sandra sintió en ese momento que sus oraciones habían sido escuchadas y que por fin iba poder pagar sus cuentas atrasadas.

¿Por qué Sandra se vio envuelta en narcotráfico?

Sandra le pregunto al hombre acerca del trabajo, qué era lo que ella tenía que hacer y cuánto le iban a pagar, el hombre le respondió que el trabajo se trataba de llevar diferentes tipos de mercancía fuera del país y por cada viaje le iban a pagar tres millones de pesos.

Esto fue algo que dejo sorprendida a Sandra ya que en su antiguo trabajo solo estaba ganando $800.000 pesos mensuales.

Sandra aceptó el trabajo que aquel hombre le estaba ofreciendo ya que lo estaba viendo como una salvación a su situación. En el primer viaje que Sandra iba a realizar, lo haría hacia España y en su equipaje llevaba dos kilos de cocaína, la actitud nerviosa de Sandra despertó la curiosidad de los agentes antidrogas del aeropuerto El Dorado.

Los agentes antidrogas revisaron el equipaje de Sandra para saber que era lo llevaba, en el interior de la maleta disfrazados en bolsas de café se encontraban los dos kilos de cocaína. Sandra al ver esto lo único que hizo fue estallar en llanto ya que suponía que la llevarían presa por narcotráfico.

Ella podría llegar a recibir una pena de hasta doce (12) años. Sandra decidió contratar a un abogado para que la pena impuesta no fuera en prisión sino domiciliaria. En la audiencia de imputación de cargos, el juez le dio a Sandra una pena de 8 años de prisión por el cargo de, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.

El abogado penalista apelo la decisión del juez ya que Sandra es madre cabeza de hogar y se hace cargo de su mamá la cual tiene una enfermedad que no la deja movilizarse. Gracias al excelente trabajo realizado por el abogado penalista Sandra recibió prisión domiciliaría.